Nuestro centro ha desarrollado el programa de impartición de una segunda lengua, francés, de forma experimental durante varios años hasta su consolidación posterior de acuerdo con la ORDEN EDU/1330/2009, de 19 de junio, por la que se regulaba la impartición de la segunda lengua extranjera en el tercer ciclo de la educación primaria, en centros docentes sostenidos con fondos públicos de la Comunidad de Castilla y León.
A lo largo de estos años la puesta en práctica del programa ha resultado satisfactoria, positiva y enriquecedora para nuestros alumnos por lo que nos planteamos la posibilidad de poder continuar con dicho proyecto.
Entre los objetivos que nos planteamos destacamos los siguientes:
La enseñanza de una lengua significa el dominio de las competencias que ponen al alumno en condiciones de comunicarse con ella. Por tanto, nuestro objetivo preferente es lograr un alto grado de comunicación tanto oral como escrito; de cualquier modo, no conviene descuidar el refuerzo gradual de las estructuras gramaticales básicas y del vocabulario esencial, que debería ser reproducido oralmente y por escrito por cada uno de los alumnos.
Una primera aproximación al Francés debe centrarse en su faceta oral primordialmente, apoyada con los recursos no verbales necesarios para que se realice un aprendizaje óptimo y con significado real. La motivación y variedad del material en estos primeros niveles constituye otro de los elementos clave para iniciar a los alumnos en la materia.
Se procurará ir recurriendo a todas las destrezas básicas de una lengua: audición, lectura, escritura, expresión.
La metodología activa, que involucra a los alumnos en su propio aprendizaje, es la más indicada. Hacemos cosas “agradables” utilizando la lengua extranjera. El alumno como mejor se siente es “haciendo algo”. Por tanto, lo que le ofrecemos son juegos, manipulaciones, movimientos, etc. Está ocupado en algo que le agrada, se asegura la identificación palabra-objeto, expresión-acción. La tarea principal es hacer cosas y decir cosas.
Pretendemos desarrollar una competencia comunicativa; el enfoque es comunicativo y pragmático: se aprende para comunicar y se comunica algo. Se resume como sigue:
- AGRUPAMIENTO DE LOS ALUMNOS
Conviene variar con frecuencia la forma de agrupar a los alumnos, desplazándose a los lugares más adecuados para las distintas actividades: pizarra, ordenador, tablón de anuncios, pupitres... Estos cambios sirven para que los niños disfruten de las mejores condiciones para observar o intervenir, pero también para que la clase les resulte más entretenida y llevadera.
Algunas actividades pueden desarrollarse en lugares distintos y apropiados: laboratorio de idiomas, biblioteca, gimnasio, sala de audiovisuales, etc. Los desplazamientos a estos lugares contribuyen a la variedad antes mencionada y son ocasiones para seguir desarrollando hábitos de comportamiento.
- EL AULA COMO ESPACIO LÚDICO. LOS JUEGOS DEL LENGUAJE.
El niño es un ser que juega, que se desarrolla por medio del juego, del cual se sirve para ejercitar sus capacidades y para afirmar su personalidad.
El juego puede continuar siendo en este ciclo una forma eficaz para la adquisición de conocimientos y para estimular el aprendizaje de una lengua extranjera.
El profesor de lengua extranjera debe aprovechar todo el potencial de que dispone el niño para llevar al aula la acción y el juego. La dramatización, las simulaciones con máscaras, disfraces etc. encajan en esta definición y nos acercan a la identificación entre “juego de lenguaje” y “acto de habla”. Los niños en la situación de comunicación planteada en clase hacen “como si...”, “juegan a...” y simulan con la ayuda de alguien que ya sabe.
- RECURSOS HUMANOS
Para la realización de este programa contamos con una maestra con la titulación (C1) o habilitación requerida para su impartición:
- RECURSOS MATERIALES
La idea de que cada alumno es importante debe ser tenida en cuenta en los enfoques metodológicos de todas las áreas, y esa idea está presente en nuestro proyecto de francés, en el que contemplamos distintos enfoques y distintas actividades para atender a la diversidad del alumnado. Esta diversidad se refiere tanto a los modos de aprendizaje como a las capacidades de los alumnos.
Así pues, partiendo de una idea pedagógica que incluya el tratamiento de la diversidad del alumnado, el profesorado adaptará y variará la metodología de forma que se dé respuesta a las necesidades de cada uno. Igualmente, el espacio de la clase se adaptará a las distintas actividades que en ese sentido se lleven a cabo, como hemos venido haciendo desde que se implantó el francés como segunda lengua, como experiencia.
La evaluación es el proceso de obtener información y utilizarla para formar juicios que, a su vez, utilizaremos en la toma de decisiones.
En nuestro caso nos centraremos sobre todo en la evaluación formativa y en la final.
En este sentido, los contenidos que aparecen en este proyecto deben entenderse, sólo, como un instrumento para desarrollar la competencia lingüística en esta segunda lengua y nuestros alumnos aprecien la importancia del conocimiento de otros idiomas como herramientas que posibiliten su comunicación en determinadas situaciones con otros ciudadanos europeos. Entendiendo que en este corto espacio de tiempo, dos años de impartición del idioma, nuestros alumnos únicamente podrán realizar un acercamiento a esta segunda lengua, debiendo considerar este periodo como mera introducción a un segundo idioma.